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domingo, 25 de agosto de 2013

¡Qué mantequilla!

La mantequilla que encontré costaba 300 bolívares y era ¡gringa! Al llegar a casa pensaba: ¡estoy consternada por manteca! Ojalá esa fuera la única angustia de la familia de la enfermera asesinada en la maternidad y no el haberla perdido a manos de dos psicópatas todavía libres. Exhalas absorto: ¿cómo es que llegamos a esto? Viajas a países sin petróleo y cada vez encuentras en ellos más desarrollo y, por supuesto, más mantequilla. Debemos un dineral a Panamá por lo importado, gracias a que los incompetentes tienen años, despojando por envidia, a los calificados. 

No se nos paran los pelos de punta, ahora nos los arranca de la cabeza, la última colección de criminales. Somos líderes mundiales multiplicando nuevas formas de delinquir. Y este gobierno egoísta, lo único que cree urgente es una habilitante, para que el Rey Midas haga oro para él y caos para los demás. Sueltan la cadena del dólar para que llegue a quien sabe cuánto en diciembre. No pueden hacer funcionar los hospitales y, entonces, ahorcan a las clínicas para que tampoco tengan ni hisopos. No son eficientes y los demás tampoco pueden serlo. El pueblo tendría puntos de comparación que delatarían tanta desidia. Jamás estuvo en sus planes mejorar la vida de quien fue, según dicen, discriminado y, por eso, han hundido sistemáticamente al resto. Una revolución que siempre avanzó, sí, hacia lo más profundo del hoyo. Pero sola no. Arrastró a todo un talentoso y hermoso país.

Nunca estuvo en sus estrategias minar a Venezuela de progreso y, quienes tuvieron el privilegio siquiera de vivirlo alguna vez, antes de llegar ellos, son homologados ahora con esa otra parte que jamás lo conoció y que jamás lo hará con ellos en Palacio. Lo cierto es, como leía en estos días: que no hay mejor método para pelear contra los corruptos, que dejar de serlo. Punto. Sin tanta leguleyería cuyo propósito sabemos no es arreglar algo, sino fregar a alguien. Para colmo, el gran anuncio de la semana fue dar detalles del magnicidio número... ¿Por qué número es que vamos? Nos ven cara de idiotas consecutivamente. ¿Nos la ven o la tenemos? 

Rigonz

domingo, 25 de marzo de 2007

mi amigo roquero

No existe un término para definir al síndrome que afecta a muchos en esta ciudad, y creo que en todo el país, en cuanto a movimiento musical se refiere. Yo lo llamo “síndrome del pana”.

El síndrome puede atacar a todo aquel que, a medida que se va adentrando en el medio y comienza a conocer a gente y personalidades de este ambiente, va descubriendo una frase muy utilizada: “¡tranquilo!, yo no pago porque ese es pana mío”. Aquí es donde me empiezo a preguntar: ¿ell@s son tus amig@s por la sencilla razón de que te dejan pasar? y ¿tú eres realmente amig@ de alguien? Como “amig@”, ¿valoras el trabajo de l@s demás?

Para tratar de demostrarlo de manera clara, veamos los pasos con las respectivas cantidades de los costos de ser músico. A ver si me explico.


Paso 1: Mamá, quiero ser roquero.

1.1 Instrumentos: Una guitarra, por más usada que esté y genérica que sea, tiene un valor mínimo de 500.000 mil bolívares. Nombro la guitarra por ser el instrumento principal del rock, no quiero ni mencionar el valor de un bajo, de los amplificadores o de una batería que, por si no sabían, vienen sin platillos (empiecen a sumar).

1.2 Ensayo: Las bandas pagan, más o menos, 10.000 bolívares por hora de ensayo y se ensaya mínimo 2 horas y 2 veces a la semana (busca una calculadora, la cuenta está por alargarse).

1.3 Demo: Un estudio de grabación cobra por horas. Horas de grabación, mezcla y masterización. Con suerte, grabar 4 temas que queden pobremente decentes, se lleva unas 10 hrs. de grabación, aproximadamente otras 16 hrs. de mezcla y master, sumadas a unas 4 horas extras, cuando te das cuenta que un instrumento no quedo como era. Esto da un total de 30hrs de trabajo y esfuerzo. (Ahora multipliquen 30hrs. x 15.000Bs. que es el monto que cobra aproximadamente un estudio de grabación pequeño. Sigue incrementándose la cuenta).

1.4 Reproducción: Ésta, la van a realizar de manera casera y el costo se resume en: 900 Bs. por cada CD virgen. El lote de reproducción, que ambiciosamente se acostumbra, es de 100 discos (sigan sacando cuentas, 900Bs. x 100) y con respecto a la carátula, hecha en power point (para no incluir el costo de un diseñador gráfico) y sacada en la impresora, es difícil saber el costo. Pero, en la calle una impresión a color ronda los 1.000 Bs. (y se alarga la cuenta: 1.000Bs. x 100). Ojo: los vas a regalar para que la gente escuche y sepa de qué se trata la banda. ¡No sueñes con venderlos!

Luego de esta travesía, la siguiente fase es “Darse a conocer”


Paso 2: ¡A tocar se ha dicho!

2.1 El Toque: Ésta, creo, es la misión más difícil. Primero, hay que encontrar el lugar donde se pueda hacer un evento: local donde el dueño, como buen negociante, entiende por una buena noche sólo si hay una gran cantidad de dinero en la caja registradora. Él no sabe de géneros, no sabe nombres de bandas y mucho menos como se pronuncian. Ni de quién es bueno o malo, quién tiene los humos en la cabeza, ni quien se peina y se viste de esta manera o de la otra. Muchísimo menos sabe qué es un “re” o un “la” y, en raras ocasiones, distinguen un bajo de una guitarra. Además, ni se te ocurra pensar en que te van a pagar. Prácticamente, según ellos, nos están haciendo un favor cuando todos sabemos que la cosa no es así.

Todo salio bien. El dueño del local accedió y te dio una fecha. Pero, con una labia de comerciante exitoso, te dice lo siguiente: “bueno chamo, ¡échale bolas! pero eso sí: me tienes que llenar el local y que consuman”. Porque la barra es de él y, como si no supiéramos que la ganancia está en el licor, decimos que lo que queremos es tocar y que no nos importa si él se queda con la mejor tajada. Nosotros nos rebuscaremos con las entradas. Con tal, “yo tengo un poco e’ panas que pueden venir”.

Siguiendo la conducta del mercado, se pone la entrada en 3.000 Bs. (precio prácticamente congelado desde el 1.996) y con derecho a una cerveza. Lo que se resume en 2.000 bolívares para las bandas. (A ver, tocan 2 bandas, o sea, 1.000 para cada una, que dividido entre 5 integrantes nos da 200 Bs. para cada uno. Menos que un bon ice).

2.2 Publicidad:
Con la fecha en mano, empiezan los e-mails y los mensajes en las páginas web más conocidas y las menos conocidas también y, dependiendo del plan que tengamos en nuestro celular, mandamos mensajes de textos. Uno de los miembros de la banda tuvo la genial idea de sacar unos flyers o volantes. Entonces, los hace en tamaño media carta para sacar 2 en una sola hoja en un centro de copiado universitario, donde tienen el mejor precio (100 Bs. por hoja y sacan 100 hojas. Anoten y sumen).

2.3 Backline: Aquí comienza la parte que se convierte en el dolor de cabezas de muchos. Para los que no están familiarizados con este término, es simplemente la cantidad, especificaciones y marcas de amplificadores, batería y requerimientos de sonido que se necesitan para las bandas.

Por lo general, se cuadra entre las bandas para que cada quien aporte lo suyo. No hablemos de alquiler, primero porque en Valencia existen pocas, por no decir ninguna empresa, que alquile equipos para estos eventos. (Salvemos el costo de esta etapa por tener el equipo propio o prestado. Solamente sumen el imaginario gasto de los celulares con la llamadera a todo aquel que conozcamos y que pueda ayudarnos)

2.4 Sonido: Sabiendo la mala fama que tienen estas empresas cuando de rock se trata, al final siempre hay que contratar a alguien. El costo de éste, no baja de 1.200.000 bolívares la noche, sin ni siquiera cumplir con las especificaciones, standard de microfonía y de P.A., que se requieren para sonar medianamente decente (sigue incrementándose la suma).


Paso 3:
La Fama

3.1 El evento: Ya todo está cuadrado. El tipo del sonido llegó con 2 horas de retraso, el guitarrista que se había desaparecido porque peleó con la novia apareció y la mama del bajista por fin le prestó el carro. Los otros 3 de la banda se fueron en taxi porque no cabían. (5.000 Bolos la carrera mas corta en taxi. ¡Sumen, sumen!).

El evento va viento en popa. El sonido montado, las bandas completas y mandan a la novia del vocalista a la puerta para que ella cobre las entradas y le dé, a las personas que vayan entrando, el ticket de la cerveza que hicieron con el papel sobrante de los flyers y un sellito de hello kitty, que le robaron a la hermanita del baterista.

Entre las 10:30 y 11 pm., empieza a llegar la gente y hacen la cola para entrar. El tipo del local no tiene buena cara como reacción a algunas crestas, tatuajes y piercings que se dejan ver por ahí.

Después de pasar por todo este vía crucis, te llaman a la puerta porque alguien está preguntando por ti. Es tu “pana” que sube los brazos para que lo veas. Se te acerca, te abraza y te dice: ¿Qué pasó pana? Déjame pasar ahí pues... Y si no lo haces eres un coño e’ madre.

Total:

Guitarra

500.000

Ensayos (por semana)

20.000

Grabación del demo

450.000

Reproducción

90.000

Carátula

100.000

Flyers

10.000

Sonido

1.200.000

Taxi

15.000

Total de gastos

2.386.000

Total de ganancias por banda

00

Tener un amigo roquero

No tiene precio


Moraleja:

El verdadero amigo es quien paga el valor de la entrada sin réplicas. Porque está conciente de lo que cuesta, en dinero y esfuerzo, poder tocar con tu banda y sabe, además, que tú y tu trabajo valen más que 3mil bolívares. GRACIAS A JAVIER, JOSE LUIS Y DIANEL POR ABRIRME LOS OJOS

HAblame el Vieja....